lunes, 15 de febrero de 2010

Entrevista exclusiva al monumento de La Libertad


Nuestro amigo José Zegarra nos envía una entrevista exclusiva con la remozada estatua que identifica a la Plaza de Armas de Trujillo. Durante el diálogo, la vieja mole analiza la situación del Trujillo actual. A escucharla.


José Zegarra Valle.

Esta estatua se ha hecho célebre por su escultor, el artista alemán Edmond Möeller y porque al traerla en barco -en cierto trayecto-una de las pequeñas partes de la estatua cayó al mar y nunca se recuperó. Los transeúntes pasan a su alrededor y se sienten simples hormigas ante la impresionante mole de mármol.
Más de una vez se me ha ocurrido “entablar conversación” con dicha belleza artística, imaginándome lo que podría trasmitir desde su privilegiada posición, capaz de auscultar cuanto ocurre día y noche en la primera plaza trujillana, entre multitud de gente que la recorre y apodera de sus instalaciones.


Así el probable diálogo en ficción sería el siguiente:

-¿Contenta con el despliegue de luces para atrae admiradores y ser nuevamente centro de atracción?
-Digamos que sí…aunque para la gran mayoría sigo siendo poco interesante, prefiero lo intrascendente.

-¿Te refieres a estrados con fines políticos, fiestas bailables bandas de musicales, marchas y otros sucesos bulliciosos?
-Por cierto, no hay acaso otros escenarios. Veo que en vez de proveer cultura educación ciudadana, se esmeran en dar múltiples distracciones, atentando contra la tranquilidad.

-¿Y aquello de “Capital de la cultura”, lema que cierta gente sigue vendiendo para atraer turistas?
-(Sonrisas) ¿Hablas en serio? Pues tú mayormente escribes en broma y no sería extraño me estés entrevistando en ese tono.

-¿De ninguna manera, lo tomo como una conversación y no sé si el editor lo publique. Al menos, menciona lo que te disgusta…
-Ya no veo a los trujillanos capaces de hacer respetar su identidad regional, valiosas personalidades listas a hacer valer su jerarquía ante cualquier atropello. Seguramente han desaparecido y las generaciones actuales las desconocen.

-¿El embellecimiento de luces actualmente ha permitido recuperar una mayor imagen del centro cívico?
-Me temo que no; ahora veo mucha gente y más desorden, pero menos calidad ciudadana. Se trata de personas sin instrucción, sin sensibilidad por los bienes monumentales, no lo aprecian, menos lo valoran.

-¿El lenguaje soez que usan debes soportarlo?
-Es la mejor prueba del analfabetismo frente a la cultura. Entonces estamos ante autentica barbarie colectiva. A ver tú -como comunicador-supongo que puedes exponer ciertas salidas.

-Aunque te parezca mentira, seguro estoy que seguimos conformes con el deterioro artístico, pues somos parte de la impotencia ¿Qué hacer?
-Tu criterio me parece preocupante. Debe iniciarse una campaña para recuperar el aprecio y afecto por las ciudades, en especial por sus bienes particulares.

-Acaban de destruir parte de los frisos de una importante huaca y ello indica el nivel lopesco a donde hemos llegado.
-(Su voz se hace imperceptible) Es tarde, la plaza va quedando en soledad y si debo hacer una reflexión es que nada va a cambiar, conocemos a las autoridades siempre contemplativas, perdonando hasta a quienes pintarrajean solemnes espacios, se reúnen a vociferar y lanzar arengas fuera de control.
Ojalá -algún regidor- pueda devolver el brillo a nuestra Plaza Mayor.

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